Los icebergs políticos 2019

Todos quieren ser de centro. ¿El centro de la atención? Sí, en política siempre es así, después de todo, la idea es conseguir votos pero además, el centro del espectro político. Como puede verse en el esquema que representa el posicionamiento en el espectro político, conocido como "esquema de Nolan" por el apellido de su autor. Este esquema consta de cuatro vértices y una zona central, de ahí la expresión "centro político".






El espectro político uruguayo, como el de todos los países democráticos del mundo, va desde la extrema izquierda, estatista y, según sus simpatías con dictadores extranjeros históricos (como por ejemplo, Stalin) o actuales (Díaz Canel, Ortega, Maduro, etc.) hasta la extrema derecha, como señalan acusaciones de pertenencia a grupos neonazi en uno de los incipientes nuevos partidos que estrenan en estas elecciones.

Ahora bien, ¿Por qué la metáfora del iceberg? Bien sabido es que un iceberg que tiene su parte visible flotando sobre el nivel del agua mientras que la mayoría de su volumen yace bajo la superficie de la misma. La brecha entre los dos grandes bloques de la política uruguaya es tan grande qué podría decirse que se trata de dos grandes icebergs separados por una enorme grieta.

 

Desde el oficialismo se acusa a la coalición opositora de ser conservadora y reaccionaria, pero estos epítetos sólo podrían aplicarse a una minoría tan pequeña de dicha coalición, casi exclusivamente a partidos que actualmente ni siquiera cuentan con representación parlamentaria como es el caso de Cabildo Abierto, lo cual sería una punta visible del iceberg, mientras que la enorme mayoría de sectores de oposición están conformados por el partido Colorado del Partido Nacional y el Partido Independiente.

Por otra parte el actual Frente Amplio que gobierna al Uruguay desde hace catorce años se encuentra regido internamente en prácticamente dos tercios por los sectores más volcados hacia la izquierda radical como es el caso del MLN y MPP (tupamaros), el Partido Comunista, el actual Partido Socialista (en cuya interna gobierna el sector más ortodoxo y marxista), el PVP, y Casa Grande entre otros, mientras que el sector moderado o autodenominado "Seregnista" (sólo por citar un ejemplo, Seregni no estaba de acuerdo en incluir al MLN-MPP en el Frente Amplio) está representado en la imagen de Mario Bergara y Daniel Martínez, carecen de incidencia política en la interna oficialista, hecho sumado a que las dos anteriores figuras "moderadas", como lo eran el ministro Astori y el presidente Vázquez, se encuentran en el final de sus carreras políticas. Incluso una figura como el canciller Nin Novoa, que supuestamente pertenece al "ala moderada", ha mostrado ser funcional a los intereses del ala radical, cómplice de la dictadura venezolana.



¿Por qué el iceberg opositor flota "al revés"? Porque el oficialismo tilda de "conservadora" a la oposición, a pesar que sólo un pequeño partido y algún sector del Partido Nacional podrían entrar en ese lado del espectro, que aquí aparece "bajo la superficie". Sin embargo, la "punta visible" que quiere mostrar el Frente Amplio con la imagen de su candidato Martínez, también busca ocultar la enorme mayoría del partido oficialista, cuya verdadera imagen estaría mejor representada por su candidata a vice, Villar.